Estos días no voy a tener mucho tiempo para escribir, además de todas las ocupaciones que tengo habitualmente, hoy he empezado un curso que se llama "Mediación y resolución de conflictos". Ya desde su convocatoria me resulto interesante, pero después del primer día de clase creo que además será muy practico.
Una de las cosas que he aprendido hoy es que cuando tienes conflictos con otras personas, no hay que intentar cambiar la forma de pensar o ser del contrario, cada uno es como es y nadie puede cambiar a nadie, ya sea tu hija, tu marido, tu hermana, un amigo, o algún resabiado que quiera hacerte la vida imposible. Ellos seguirán siendo como son, lo único que podemos hacer es cambiar nosotros mismos, vivir el conflicto de forma que no nos afecte, asimilar que el problema lo tienen ellos. Porque las personas son como son y nadie puede cambiarlas, ante un conflicto solo podemos mirar en nuestro interior y cambiar la forma de verlo y sentirlo. Conseguir que no nos afecten, cambiando nosotros e intentar cambiar al contrario pero practicando con el ejemplo, no añadiendo más conflicto. Si tienes problemas con un hijo porque es desordenado, no lo vamos a cambiar por más broncas que le demos, no podemos cambiarlo porque él es así y probablemente solo conseguiremos estar en conflicto permanente. Ya que no podemos cambiar la forma de ser de nuestro hijo, tendremos que cambiar la forma en que nosotros vivimos ese conflicto, asimilando que es así y no lo podemos cambiar, y en todo caso le enseñaremos practicando con el ejemplo, siendo nosotros ordenados, de esta forma estaremos más conforme con nosotros mismos y nos sentiremos un poquito más feliz que si alimentamos el conflicto.
Mañana espero aprender algo más sobre la mediación en el conflicto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario